La pandemia mundial derivada de la aparición del nuevo Coronavirus en diciembre de 2019 en Wuhan, no sólo está transformando la forma en cómo las sociedades a nivel global se relacionan sin contacto físico, sino también el cómo compran, comen, aman y también cómo se comunican.
Es aquí donde acontece un cambio de paradigma, principalmente a través de las Tics que de acuerdo con una investigación realizada por RoastBrief –específicamente para México–, donde apunta que durante la cuarentena 8 de cada 10 mexicanos se comunica con sus familiares y amigos a través de Facebook, además de ponerse en contacto con sus colegas de trabajo por medio de la plataforma de mensajería instantánea Whastapp (78%) y entertenerse en redes sociales como YouTube (71%), TikTok (18%), Spotify (11%) y Twitter (7%).
Partiendo de este contexto, la práctica de la comunicación política no ha quedado exenta de esta transición a nivel mundial, sin embargo, dicha transformación parece en algunos casos concretos –principalmente en España, Italia y Estados Unidos– haber exacerbado el crecimiento desmedido de la polarización política por medio del uso de dos técnicas lastre de la comunicación digital como los son las Fake News y la utilización de granjas de bots.
En México, de acuerdo con Luis Ángel Hurtado Razo, profesor e investigador en la FCPyS de la UNAM, el país ocupa el segundo lugar mundial en difusión de noticias falsas, lo que sin duda impacta en la opinión pública debido a que el grueso de la población mexicana se informa principalmente por medio de las redes sociales.
Desde el 2018, a partir del triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador, la polarización política –por años construida discursivamente por el hoy presidente de México y también acuñada recientemente por la pérdida del poder de las derechas mexicanas– ha tenido un repunte discursivo en la discusión pública nacional, hecho que se ha reflejado también en las conversaciones digitales.
Con base en el estudio de Graphika, empresa especializada en la implementación de inteligencia artificial en marketing digital, podemos afirmar que los mayores difusores de noticias falsas no solo en Estados Unidos –con 27% de presencia en comparación con grupos liberales o de izquierdas 8%- sino en el mundo, son los grupos considerados de derechas o conservadores.
Esta tendencia, que se ha visto reflejada también en México pues, si bien, los “simpatizantes” del actual gobierno mexicano se han concentrado en grupos de activistas digitales, apoyados también en ocasiones por granjas de bots para posicionar sus mensajes de apoyo o temas de interés para la 4T.
¿Por qué la oposición? las señales indican que los ejes discursivos que buscan continuamente posicionar, son construidos a partir de mensajes con una clara narrativa en donde los sentimientos que buscan explotar, son el odio, la discriminación, la violencia e incluso la misoginia, narrativa que comparten con sus contrapartes españolas, italianas y estadounidenses.
Tuits que van desde la “certificación” de la muerte de personas que aún viven, el reporte de “filas” de bolsas con cadáveres de muertos por Covid–19, la publicación de un vídeo que documenta la destrucción de material médico supuestamente adquirido por las autoridades de salud del gobierno de México y, hasta incluso, la divulgación de peticiones de ciudadanos peruanos dirigiéndose a su presidente para solicitar apoyos de diversa índole como su fueran solicitudes de ciudadanos mexicanos.
Así, las fake news inundan los feed del microblog más famoso del mundo en nuestro país debido a estos grupos políticos. A pesar de dichas tendencias políticas en el uso de las Tics, especialmente en Twitter, los tópicos más populares en la red social del ave azul no se han acercado ni por equivocación a los temas políticos.
De acuerdo con un estudio de tendencias hecho por Twitter Latam, las discusiones sociales más populares durante la cuarentena en nuestro país, han sido aquellas relacionadas con la música, los deportes como el basquetbol y el fútbol soccer además de los videojuegos, lo que demuestra que la otra pandemia, la de las fake news que impulsan las granjas de bots, aún no permean más allá del círculo rojo de los usuarios relacionados e interesados de alguna forma en el contexto político nacional.
De esta manera se abre la oportunidad para que a partir de la revolución creativa que también vivimos en el marco del distanciamiento social, las estrategias, los contenidos y los mensajes políticos incrementen su calidad y objetividad con el propósito de contrarrestar una práctica que se ha convertido en el producto principal de algunos “consultores” y “estrategas”. Es hora de trabajar para crear la vacuna que acabe con la otra pandemia.

México. Consultor en Comunicación Política y activista digital