Por Lorena González Boscó
La mofa y la metáfora, en una cultura como la mexicana son indispensables para interpretarnos a nosotros mismos, y nuestra caricatura política lo refleja ampliamente, y por ello es incluida en la mayoría de los diarios de circulación nacional del país, tanto en sus versiones impresas o digitales, razón suficiente para aprender a leerla en el contexto de la #ComPol.
Saber de política o hacer política, me parece, es algo que se aprende de distintas fuentes. Una parte se conoce en los libros que recopilan la historia, el pensamiento y la teoría política; otra: en la observación e interpretación del diálogo que sostienen los medios de comunicación como puente entre los hechos, los periodistas, los personajes políticos y sus audiencias, y otra más, el producto de la experiencia que se adquiere participando del ejercicio mismo de la política.
En lo que refiere a los medios de comunicación, considero que la caricatura política es una uno de esos recursos educativos para la enseñanza de la comunicación política que encierra varias posibilidades de enseñanza y aprendizaje, pues en una sola imagen se relacionan: contextos, hechos y personajes; porque lo que a muchos periodistas y articulistas les llevan centenares de palabras para interpretar u opinar de un hecho noticioso, los caricaturistas lo hacen en unos cuantos trazos plegados de humor.
Pero para arrancar la sonrisa o carcajada del lector, es necesario que este cuente con códigos de referencia para decodificar el mensaje, mismos que se adquieren a partir del ejercicio constante de mantenerse informado mediante los medios de comunicación, porque es del hecho noticioso de donde parte su inspiración.
Por lo general, el mensaje de la caricatura política es la crítica constante de las acciones de gobierno y sus personajes; es un mensaje sintético que da celeridad al impacto negativo o positivo de la imagen de las acciones que realizan quienes se perfilan sobre las audiencias que las perciben. Incluso, una caricatura puede llegar a ser el único referente informativo sobre la actuación de un personaje político ante un determinado hecho.
¿Cómo interpretarla?
Aquí un ejercicio. veamos la siguiente caricatura:
La autoría de esta caricatura es de Alarcón, caricaturista para El Heraldo de México, y fue publicada el 10 de marzo de 2020. ¿Qué nos dice la caricatura? ¿a quién retrata? ¿reporta un hecho periodístico o una actitud de los personajes? ¿Qué realidad refleja? Un análisis rápido:
Durante su toma de protesta como presidente de México en 2018, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció varios cambios y prometió que los cumpliría, con el dicho popular “me canso ganso”, de ahí que Alarcón lo trace como ganso.
Al mismo tiempo, como parte de su estrategia de comunicación política, retomó Las mañaneras, conferencias de prensa que AMLO ofrece cada mañana, mismas que daba cuando fue jefe de gobierno del entonces Distrito Federal, a principios de siglo.
Pero en esta nueva temporada, las mañaneras incluyen a funcionarios de su gabinete, que a veces intervienen en ellas y a veces no, y es a partir de lo segundo que en el humor político, en particular el de Alarcón, se empezó a dibujar a los altos mandos de gabinete como floreros.
Si toda está información no la advierte quien la lee se torna compleja su interpretación. Una que podemos dar es: que mientras el gabinete (el florero), la población (los tripulantes sentados en la parte de posterior del auto) y el país (dibujado en la puerta del auto) se va al precipicio (representado por el puente roto), es porque el presidente (el ganso) lo conduce con una visión de largo alcance hacia el pasado (se representa en los binoculares).
Los caricaturistas atienden a la línea editorial de los periódicos o revistas en las que colaboran, pero en general, en México gozan de libertad de expresión y gracias a sus trazos contundentes se puede abrir o cerrar el criterio para la interpretación de un determinado hecho y el accionar de los involucrados. De ahí la importancia de tener los elementos necesarios para interpretarlas como audiencia, pero sobre todo como comunicador político.
México. Es licenciada en Comunicación y maestra en Relaciones Internacionales por la UNAM. Consultora en Comunicación Educativa y Monitoreo de Medios; su pasión, la formación universitaria. Contacto: lgobo@unam.mx